Multas de 300 a 1.500 euros por no llevar a los perros con correa

Pasear por las calles de Elgoibar con un perro sin correa se convertirá en un deporte de riesgo, cuando menos económico, el próximo mes de abril. La clave está en la decisión del Ayuntamiento de poner en valor la Ordenanza Municipal de Tenencia de Animales, con la aplicación por parte de los agentes de la Policía Municipal de sanciones que oscilarán entre los 300 y 1.500 euros a aquellos propietarios que no lleven atados con correas a sus animales cuando transiten por el casco urbano. Esta supervisión de lo que marca una ley que ya fue aprobada en 1995 incidirá también en las molestas deyecciones de animales, una lacra que ha dado lugar a muchas quejas y a más de una desagradable sorpresa entre los viandante. De hecho, el mes de abril, los propietarios de perros que no recojan las heces de sus animales encontrarán como premio a su falta de civismo multas que irán desde los 30 a los 300 euros.

Con esta última medida se deja de lado a otras alternativas puestas en marcha en Elgoibar, como la de la habilitación de espacios aptos para que los animales pudieran hacer sus necesidades (pipicanes) en el área urbana, para apelar a la responsabilidad de los dueños. «Cada uno tiene que ser responsable de su animal y debe tener en la calle el mismo comportamiento que tiene en su casa. Si alguien se encuentra con que el perro ha defecado en el pasillo de su vivienda, lo que hace es retirar las heces. No veo por qué este comportamiento tiene que ser diferente cuando el perro hace sus necesidades en la calle», manifestó el alcalde de Elgoibar, Alfredo Etxeberria, al dar a conocer la apuesta del Ayuntamiento por poner en valor la ordenanza.

Perros peligrosos
Otro de los temas de especial seguimiento por parte de la Policía Municipal es el referido a la tenencia de perros potencialmente peligrosos. En este caso, los propietarios deberán de acreditar que cuentan con una licencia administrativa para la posesión de estos animales, así como que están inscritos en el Registro Municipal de Animales Potencialmente Peligrosos. A día de hoy son siete los perros apuntados en este registro, que debe ser tramitado por los propietarios de ejemplares de las razas pitbull, staffordshire bull terrier, american staffordshire terrier, rottweiler, dogo argentino, fila brasileiro,...
Los dueños de estos perros deberán llevar a sus animales con un bozal adecuado a su tamaño y raza, así como con una cadena o correa resistente no extensible de menos de dos metros de longitud «no pudiendo circular sueltos en ningún supuesto», según se señala en la ordenanza.